El poder de la palabra
Desde niños,
siempre hemos escuchado, que esa persona o aquel hombre o mujer, son de buena
familia o pertenecen, a una buena familia (por lo que siempre nos imaginábamos,
que tenían buenos sentimientos, hacían buenas obras, eran buenas personas,
bondadosos y se portaban bien con sus vecinos).
Luego cuando
crecemos, perdemos esa inocencia y tenemos uso de razón, nos damos cuenta que a
quienes se referían, nuestros abuelos, padres y vecinos, eran quienes tenían
una buena posición económica y eran miembros de las familias más pudientes y
conocidas del barrio o de la ciudad, por lo que desempeñaban los altos cargos
públicos y políticos.
Si tu familia,
no tenía dinero, tampoco ocupaba un alto cargo político, ni público, además de
ello no pudieron culminar una carrera profesional, o habían estudiado poco, no
eras de una buena familia. Eso nos enseñaron y nos hicieron creer, lo más
triste y lamentable, es que muchas personas eran literal, pensaban que todo eso
era verdad, olvidando que solo era un decir, una costumbre adquirida en nuestra
crianza y en nuestro vocabulario.
Al trasladarnos
al ámbito, social bien sea en lo deportivo, cultural, laboral, entre otros nos
damos cuenta que eso sigue prevaleciendo, puesto que se cometen muchas injusticias
y falta de equidad al momento de reconocer y de exaltar darle la importancia, el
trato que se merecen muchas personas, que han trabajo y luchado gran parte de
su vida, en una de estas actividades. Y por no pertenecer a familias con
abolengo y adineradas, quedan en el ostracismo y no son tenidas en cuenta.
Por el contrario,
aquellos que ocuparon un cargo público y pertenecen a familias reconocidas y
adineradas de su país o región, inmediatamente después de culminar su período,
haya sido bueno o no su desempeño, son premiados con reconocimientos, bien sean
bustos y placas, recordando su labor, así como algunos colegios, carreteras,
avenidas y otras instituciones llevan sus nombres.
No vamos a
recordarlos aquí, ni sus apellidos tampoco, para no herir susceptibilidades,
pero todos sabemos quiénes son esas familias, en cualquier parte de América o
del mundo.
¿O acaso una
persona de estrato humilde, bien sea un deportista, un artesano, un pintor, un
escultor, un líder social, un representante cultural, un cantante y músico,
entre otros. Sin dinero y sin abolengo, no merecen ser reconocidos y tenidos en
cuenta, al momento de inaugurar un de esas obras, para que su nombre perdure y
quede en el recuerdo, de los habitantes de su ciudad?
Es hora pues, de
que las instituciones públicas o privadas, en donde prevalece esta arraigada
costumbre se pongan la mano en el corazón y le hagan un merecido reconocimiento,
a tanto personaje de cualquier lugar del mundo, que de verdad se lo merecen, no
importa su apellido, abolengo o posición económica o social, ¿cuántas personas
conoce usted, que se merecen ese homenaje y no lo ha recibido? pero en vida,
porque después de muertos ya para qué.
FUENTE.bible.com
Pero no solo la
condición social, el apellido, la posición económica y su preparación
intelectual, son las que priman o prevalecen para que una persona sea tenida en
cuenta, sea exaltada o valorada, sino que tristemente el sexo juega un papel
preponderante en la sociedad y la mujer, el mal llamado sexo débil, es
marginada, olvidada o rechazada a la hora de reconocer sus méritos o valorarlo,
el machismo es otra gran dificultad.
No olvidemos que
no hace muchos años, esas mujeres pudieron ejercer su derecho al voto, en una
larga lucha política y social, así como a las mujeres que les gustaba escribir,
debían hacerlo bajo un seudónimo de hombres, para participar y ser tenidas en
cuenta.
Esa lucha, librada hace muchos años, se conoce
como equidad de género, en la defensa de la igualdad que
debe existir entre hombre y
la mujer respecto al uso de los bienes y servicios en
la sociedad, para abolir la discriminación entre ambos sexos y que
no se privilegie al hombre en ningún aspecto de la vida social, tal como era
muy frecuente hace algunas décadas en la mayoría de las sociedades y la que aún
persiste en algunas partes.
Un
hombre y una mujer deben recibir la misma remuneración ante un mismo trabajo
que contemple idénticas obligaciones y responsabilidades.
Machismo histórico
¿Es la
historia, machista por naturaleza, o es en el transcurrir de la misma que el
hombre ha impuesto su condición como tal, desde los albores de la humanidad?
En el
principio de la creación del mundo, Dios creó al hombre para que dominara y
fuese el dueño de todo lo existente sobre la faz de la tierra, fue así, como el
hombre el género masculino, se hizo el amo absoluto; más adelante, Dios de una
parte del hombre creó a la mujer para que lo acompañara y multiplicara la raza
humana.
Como podemos
notar, el hombre aparentemente ha estado superando a la mujer desde su
nacimiento, ¿será tal vez por esto, o por su condición física o quizás por el
machismo que el varón ha figurado y participado en mayor número que la mujer,
en la creación y formación de lo vivido hasta la presente?
No se ha
comprobado, ni antes ni actualmente, que el hombre sea superior a la mujer en
el aspecto intelectual y mental, claro está, que en lo físico si, con algunas
excepciones de ciertas damas y algunos hombres.
Dios los
creó, con las mismas capacidades mentales e intelectuales, sin ventajas para
ninguno de los dos; la historia se ha escrito, con más nombres de hombres que
de mujeres, desde el principio de ella, el género masculino ha prevaleció.
Los
egipcios, en sus múltiples creencias, adoraban muchos dioses, respetan y veneraban
a sus faraones no faraonas.
Los romanos,
con su imperio y poderío, contaban con sus temidos y crueles césares, no
césaras.
Los
indígenas y primitivos, obedecían a caciques y jefes, no a cacicas o jefas.
Los grandes
inventos y descubrimientos, siempre han sido por parte del hombre, tales como:
imprenta, rueda, electricidad, teléfono, números artes, ciencia, etcétera.
En tiempos
más cercanos, éste machismo sobresale en el campo de las ciencias, es así, como
podemos nombrar a un gran número de hombres precursores de lo intelectual:
Platón,
Sócrates, Descartes Pitágoras Arquímedes Beethoven, Shopan, Engels, Marx, entre
otros.
¿Será que
las mujeres de esas épocas, no poseían la capacidad intelectual de hacer y
pensar igual que el hombre, o era acaso, que estaban subordinadas y sometidas
por el machismo, por el patriarcado o por las leyes establecidas’.
En el plano
social, el hombre impone su apellido por encima de la mujer, con la excepción
de la madre patria, que es el de ella, el que se antepone al del varón.
En el campo
militar, es ahora, que se le está dando oportunidad a las mujeres, para que
figuren y hagan parte de éstas fuerzas, pero aún, prevalece el machismo, puesto
que no conocemos ninguna genérala de tres soles; en la historia, los personajes
sobresalientes y recordados son varones; Bolívar, Miranda, Nariño, Sucre, Páez,
Pizarro, algunas mujeres, son nombradas, pero no con la misma importancia que
se le da al hombre.
Otros
personajes, de no muy gratos recuerdos, hacen parte del machismo de la
humanidad: Hitler, Maussollini, Napoleón, Iván el Terrible y un sinnúmero: de reyes,
emires, califas y zares, de antaño.
Si hablamos
de lo religioso, puede ser donde más se note el machismo, como ya lo dijimos
anteriormente, desde los inicios, el hombre figura por encima de la mujer; en
el antiguo testamento, y en casi todas las religiones, es marcado el machismo y
sus personajes históricos, en un alto porcentaje son hombres, algunos de ellos
son: Abraham, Moisés, Noé, Jacob, Jonás; existieron los profetas, no las
profetas; fueron doce apóstoles, no doce apóstalas; hay Ángeles, arcángeles y
querubines, no ángelas, arcángeles y
querubinas; tenemos el diablo, no a la diabla.
Dios, envió
a su hijo para salvarnos, no a una hija; el cual fue traicionado por un hombre
Judas Iscariote, no por una mujer; ¿será que si el hombre, tuviera la capacidad
de parir, María sería la madre de Jesucristo?
Con la
venida de Jesús al mundo, se dio comienzo a muchas creencias y religiones,
todas asegurando poseer la verdad.
Las tres
grandes religiones del mundo son: Catolicismo, Islamismo y Judaísmo.
En el catolicismo,
su máximo líder es el Papa, un hombre, el cual según ellos, es el sucesor del
apóstol Pedro, otro hombre, no existen
mujeres en el sacerdocio.
El
islamismo, su fundador y pionero fue Mahoma un varón, con su guía el Corán, no
reconocen a Jesucristo como hijo de Dios solo a Alá.
Judaísmo,
los profetas, son sus fundadores del antiguo testamento en el mundo árabe, con
las consabidas prohibiciones y machismo para las mujeres, en lo religioso y lo
social.
En otras
religiones como el Budismo, tiene a un hombre como fundador, Buda conocido como
el iluminado, otro varón no mujer muy venerado.
Con respecto
a los mormones, su creador fue Joseph Smith, otro varón, con sus tablas doradas
rebeladas por Dios.
A través de
las épocas, en todas las circunstancias, han sobresalido grandes personajes,
para bien o para mal, en ésta historia de la raza humana, que aún se ésta
escribiendo, contamos con nombres gratamente recordados otros no tanto entre éstos tenemos: Confucio en la China, Mahatma Gandhi
en la India, Ho Chi Mín en Vietnam, Mao Se Thun en la China, todos ellos de
sexo masculino.
Otros
grandes personajes de la historia, que influyeron en ésta parte del continente
y son: Cristóbal Colón, Américo Vespucio, Agustín Codazzi, etcétera, todos
hombres, han contribuido para corroborar el patriarcado histórico.
Hombres y
mujeres somos iguales, como anteriormente lo expresamos, tanto mental, como
intelectualmente, el mundo seguirá su marcha y la historia se seguirá escribiendo
día tras día, ojala con la misma participación del mal llamado sexo débil, que
es tan capaz, que paren hombres.
FUENTE.unapiquitos.edu.pe
Todos tenemos
que agradecer a una mujer, por habernos traído al mundo, de igual manera,
muchas de ellas, sin ser madres biológicas, dedicaron y dieron todo su amor y
empeño, para que muchos seres humanos recibieran ese calor y amor de madre, que
por alguna circunstancia de la vida, algunas de ellas, no se lo pudieron
brindar, ese amor, que no se compra ni se iguala con nada.
La mujer, debe
ser querida, respetada y amada, en cada instante de la vida, simplemente porque
son una parte irremplazable de la raza humana.
Ellas, que todo lo pueden si así lo quisieran, dominan al hombre de
cualquier manera, nosotros, tan solo esperando la orden de ellas, e irremediablemente
vidas compartidas.
Todas esas enseñanzas, palabras y costumbres quedan en el
pensamiento y en la psiquis de los seres humanos que la mujer es el sexo débil,
que todo lo negro es malo o que si piensas mal acertarás, ¿Será por eso que la
costumbre o lo natural en el ser humano es ser pesimista, qué no existe equidad
de pensamientos? Más de la mitad de la personas, son pesimistas. Los griegos
decían. Domina la mente y dominarás el mundo…! La mente es muy poderosa y ella
irradia y proyecta todo lo que pensamos y deseamos.
¿Cuántas veces, no le hemos contado
a nuestros amigos, vecinos o persona de confianza, algún proyecto de vida o
alguna idea y casi siempre la respuesta es negativa? (Bien sea por envidia, por
desconocer el tema, en fin por ser pesimistas) no creo que eso sea posible, te
irá mal, será que tu si eres capaz de hacer eso? Cosas así, que en nada ayudan
y hacen que tú también puedas dudar de tus condiciones, de tu idea o proyecto,
simplemente porque la gran mayoría son negativos, o pesimistas.
Esto es una clara muestra de la falta de equidad y
equilibrio en la gran mayoría de los pensamientos de las personas, casi siempre
prevalece o gana lo negativo, la parte pesimista, olvidando sus condiciones o
potenciales para realizar una labor o cualquier arte en la vida, es decir somos
injustos con nosotros mismos.
Ese muchacho, que tiene inclinaciones artísticas y desea ser
reconocido, bien sea como cantante, como compositor o músico, pero por ser de bajos recursos y
sin educación o alguna preparación, no se atreve a mostrar sus condiciones, Así
mismo pasa con aquel deportista, sea boxeador, beisbolista, futbolista o
cualquier otro disciplina, en muchas oportunidades se pierden esos talentos,
por falta de apoyo o por esas energías negativas de personas pesimistas, que lo
rodean y no lo animan, para seguir adelante.
Este pesimismo lo vemos y lo notamos a diario, más en esta
época de pandemia, de La COVID-19 desde hace dos años muchas personas dicen!!!
La situación está fea y se pondrá mucho peor, con este virus, como si desearan
o hicieran fuerza para que así sucediera y tener la razón negativamente. ¿Y si
la situación empeora, será que a ellos no les afectará? Ese es el pensamiento
del pesimista en vez de decir, esto está difícil, pero tiene que mejor, con fe
y optimismo para el bien de todos.
El profesor Tim Spencer, del hospital St Thomas de Londres,
Reino Unido, ha estado estudiando para resolver la manera, de cómo se forma
nuestra personalidad El profesor Spencer afirma, que a lo largo de nuestras
vidas, debido a factores ambientales, nuestros genes constantemente van
ajustando la intensidad con que se expresan, es un proceso conocido como epigenética, es decir, de acuerdo a
nuestro entorno y al modo de vida, así mismo nuestros genes van recogiendo esas
experiencias y vivencias.
El profesor que se considera optimista, espera que esta
investigación lleve a mejores tratamientos para combatir la depresión y la
ansiedad. Se sabía que no podemos cambiar los genes, pero ahora entendemos, que
existen estos minimecanismos que pueden reprenderlos o apagarlos, es decir
recobrando el control de nuestros genes, para apartar el pesimismo y atraer las
buenas vibras, es otras palabras, ser positivos, ser optimistas.
¿Será que esas personas, que han triunfado en la vida, (bien
sean deportistas, empresarios, artistas, profesionales y grandes líderes)
creyeron en esos consejos negativos y pesimistas, de sus amigos, familiares o
más allegados, cuando fracasaron en sus primeros intentos? Esto es una clara
muestra de que la perseverancia, el trabajo y la mente positiva, cuando se cree
y se piensa en alcanzar las metas, podemos hacer grandes cosas en la vida.
Todas estas
costumbres las aprendemos desde nuestra infancia, puesto que los seres humanos,
somos muy susceptibles a las cosas que escuchamos o aprendemos, desde la época
de niños y en el trascurso de nuestra educación y del diario vivir, algunos son
literales, creen al pie de la letra todo lo que escuchan, aprenden y ven.
La palabra tiene
poder y esta condiciona la manera de percibir las cosas y la forma de actuar y
de reaccionar de todos nosotros, de acuerdo a nuestro carácter y la percepción
que tengamos de la vida.
Todos desde
niño, le tememos a la oscuridad, es decir el color negro es sinónimo de peligro
y de cosas malas. En la oscuridad salían los espantos, en la oscuridad, se
cometen asesinatos y otros actos delictivos, no quiere decir esto, que a la luz
del día, no se hayan cometido delitos, pero la oscuridad, es propicia para
ello.
Si una persona
se porta mal, se le catálogo de tener un corazón negro, si la persona tiene
acciones deshonestos o impuras, se dice que tiene pensamientos negros, si se
cruza un gato por tu camino, pero este es de color negro, esto es señal de mala
suerte, así nos enseñaron.
Si se pierde o
se daña algo, en el hogar, o en el trabajo, se acostumbra a decir que una mano
negra fue la causante de ello, todas esas cosas las aprendimos desde niño. Se
ha estigmatizado y satanizado el color negro.
Se imaginan
ustedes, la sensación de un niño, cuando veía a una persona bastante morena,
después de haber escuchado todas esas cosas relacionados con el color negro,
inmediatamente la asociaba con algo malo.
¿Será, que solo
en clubes de tiro, no se estigmatiza al
color negro? Porque allí, la frase más común es tiro al blanco.
La oscuridad es
una sola, pero cada quien escoge su momento de oscuridad o tinieblas de acuerdo
a sus intenciones o pretensiones en la vida.
Existe la oscuridad que asusta seamos o no niños, la oscuridad que tranquiliza,
cuando te quieres alejar del bullicio y de la cotidianidad.
También está la
oscuridad de los amantes, los que desean privacidad y soledad, la oscuridad de
los asesinos, para cometer sus crímenes, en conclusión, la oscuridad no es totalmente
buena, ni totalmente mala, es el uso que le demos a ella.
FUENTE.dw.com
FUENTE.rtve.es
Frases
sobre la luz y la oscuridad
Me encanta la luz,
porque me muestra el camino, pero soportaré la oscuridad, porque ella me
mostrará las estrellas (Og Mandino).
Aunque la luz
brilla, sobre las cosas impuras, está jamás se contamina (Agustín)
Donde hay mucha
luz, recuerda que la sombra también es más profunda (Johann Wolfgang von Goethe)
En los momentos
más oscuros, debemos centrarnos en la luz (Aristóteles
Onassis)
La luz es
la mano izquierda de la oscuridad, y la oscuridad es la mano derecha de la luz;
las dos son una, vida y muerte, juntas como amantes. – Ursula Kroeber Le Guin
Quizás, tengas
que conocer la oscuridad, antes de apreciar la luz (Madeline L’Engle)
La fe, es el
pájaro, que siente la luz, cuando el amanecer todavía está oscuro (Rabindranatth Tagora)
Podemos perdonar
fácilmente a un niño, cuando le teme a la oscuridad, la verdadera tragedia de
la vida, es cuando un hombre le teme a la luz. (Platón)
Cuando enciendes
una vela, no olvides que esta también proyecta una sombra (Ursula Le Guin)
Todo ser humano,
es una mezcla de luz y oscuridad, confianza y miedo, amor y odio (Jean Vanier)
Nuestra existencia no es más que un cortocircuito de luz entre dos
eternidades de oscuridad.–
Vladimir Nabokov
A la luz, leemos
los inventos de otros, en la oscuridad inventamos nuestras propias historias. (Alberto Manguel)
El mundo necesita oscuridad, porque el exceso de luz no nos ilumina ni
nos abriga, sino que nos ciega y nos abrasa. – Varg Vikernes
Como podemos
notar, somos una dualidad, de luz y oscuridad, ¿cuál prefiere usted?
Como ya lo hemos reseñado
en anteriores párrafos, pero que tal, si a lo físico, a la raza, a su color de
piel, al sexo o lo atrayente del ser humano, no se le diera la importancia y el
valor exagerado, que en muchas oportunidades y que casi siempre se le ha dado,
a través de la historia, muchas cosas no hubieran ocurrido y la historia de la
misma historia, se escribiría y se contaría de otra manera.
¿Te has imaginado, un
mundo donde todos fuésemos de un mismo color? Es decir, sin distinción de
razas, o color, o todos blancos, negros, indígenas, árabes o asiáticos, con
dinero, joyas y de una posición económica y social igual ¿Será que se hubieran
evitado muchas guerras y masacres de la historia humana?
El pueblo de Abraham,
no hubiera permanecido tantos años preso en Egipto por culpa del racismo; Roma
y Grecia, así como otros imperios, no se disputarían la supremacía, de quién
masacró y asesinó a más personas, por no pertenecer a sus razas y por causa de
la xenofobia.
Si todos fuésemos de
un mismo color de piel, claro está, con sus consabidas diferencias físicas y
faciales, para poder diferenciarse los unos de los otros.
¿Será que los
oprimidos y torturados hermanos del África, hubieran llegado a América como
esclavos? ¿Y qué sería del Apartheid y
de Nelson Mandela, (separación) en Sudáfrica? ¿O tal vez, los millones de
indígenas, hubiesen sido sometidos, perseguidos, torturados, asesinados y
despojados de sus tierras y riquezas, como ha venido sucediendo
sistemáticamente con el transcurrir de la historia?
¿Se hubieran evitado
las dos guerras mundiales y muchas otras, si no existiera el racismo? o ¿Acaso
Hitler hubiera cometido el holocausto nazi, en contra de los judíos?
¿Los españoles,
ingleses franceses y otros habitantes del viejo continente, no se hubieran
llevado nuestras riquezas para su continente? ¿No se recordaría funestamente lo
acontecido en Hiroshima y Nagasaki, como víctimas de la bomba nuclear.
¿O será que tampoco
hablaríamos de los veteranos de las guerras de Vietnam, Corea, el Golfo
Pérsico, Afganistán, Libia, Irak, Siria y de otras invasiones y guerras a otras
naciones, por cuestiones, racistas, económicas o religiosas? ¿No hubieran
asesinado al líder negro y candidato presidencial norteamericano Martin Luther King?
De igual manera,
¿sería que el color negro, no sería visto ni nombrado de manera despectiva, no
existiría xenofobia, hacia los árabes, por parte de los europeos y gringos,
como tampoco, rechazo y desprecio hacia los latinos, ni mucho menos los
caribeños y nacidos en esta parte del continente, serían vistos como una raza
inferior.?
Si esto fuese posible
el estatus social, ya no sería por el color de tus ojos, piel y cabello, ni mucho menos creer y decir,
que los del norte, los nórdicos y escandinavos son la raza pura y excelsa como
muchos piensan y quieren hacer creer, claro está si todos fuésemos de un mismo
color de piel o de raza.
Si todos fuésemos de
una misma tonalidad de piel, ser alto, rubio y de ojos claros, ya no sería lo
más importante y si todos tuviéramos el mismo matiz, el famoso y desaparecido
cantante estadounidense Michael Jackson no se hubiera cambiado el tono de su
piel.
Si todo esto fuera
posible, las mujeres y algunos hombres, dejarían las ínfulas y los delirios de
ser rubios, desconociendo y olvidando, que al teñirse el cabello de rubio,
están gritando a los cuatro vientos el inconformismo y descontento por el
aspecto físico que les tocó, y son ellos los primeros racistas, al despreciar y
rechazar su color.
Si todos llegarnos a
ser de un mismo color de piel, ¿Será que viviríamos mejor y en paz, sin tanta,
desigualdad, injusticia y miseria?
Si esto llegara a ser
posible, muchas naciones, tal vez, entre ellas, varias africanas posiblemente,
no morirían las millones de personas que a diario fallecen, bien sean por culpa
de conflictos, religiosos, políticos, militares y por supuesto raciales.
Y si todo esto fuese posible. ¿Será que las
riquezas estarían bien repartidas, equitativamente dándole a cada quien lo que
realmente se merece, es decir aplicando justicia lastimosamente el mundo no es
así.
Estos sucesos de
racismo, discriminación y elitismo, originaron otros acontecimientos y
reacciones que marcaron profundamente la historia de la humanidad, como el
abandono de Martín Lutero de la iglesia católica, quien fue el padre de la
reforma protestante y de sus 95 tesis en Latín y después traducidas al alemán
su idioma natal, contra las indulgencias de la iglesia católica y la comisión
de los pecados en las épocas de Julio II y León X, la llamada Edad Moderna.
Todo esto debido a los
abusos y excesos que se cometían, ya que se asesinaba hasta a niños recién
nacidos, por los desacuerdos religiosos, como vemos en los planos religiosos,
militares, sociales y culturales y en muchos otros de la vida humana, está
presente la injustica, los crímenes, vejámenes y otras crueldades más,
imponiéndose el fuerte sobre el débil, para tratar de vivir mejor.
De igual manera, se
puede decir de los enfrentamientos entre los árabes que vienen asesinándose
desde hace mucho tiempo, entre Chiitas, Sunitas y Kurdos (recuérdese, la
guerra, entre Iraq e Irán) y por
supuesto la de palestinos y judíos, por diferir en sus creencias religiosas.
Olvidando, que todos provienen
de un mismo origen, las crueles y tristemente mal llamadas guerras santas en lo
que hasta la fecha, no se han puesto de acuerdo, a sabiendas de que Jehová, Yahvé
y Alá es el mismo Dios; para completar, han metido la parte política y
económica con la aparición del petróleo, complicándolo aún más, pasando de una
invasión a otra, entre pueblos hermanos y nuevamente vemos un suicida
inmolándose para protestar.
Hitler torturó y
desapareció a millones de judíos por no ser de la raza excelsa y pura como él
deseaba, ignorando, que provenía de esta, por parte de su madre. Más tarde
Japón vivió en carne propia la muerte y el horror, cuando en 1945 fue lanzada
la bomba nuclear por parte de EE.UU en Hiroshima y Nagasaki. Como se ha podido
notar la historia se ha ido repitiendo constantemente ya que son varias las
guerras, de las cuales dos han sido mundiales, las que han puesto en vilo a
toda la humanidad.
FUENTE.economipedia.com
Se teme que la próxima
guerra tenga efectos desbastadores para nuestro planeta y los que habitamos en
él, por lo avanzada y poderosa de la tecnología y el elevado deseo de dominio y
poder de los actuales dirigentes mundiales, pero hay quienes afirman, que si
hubiese una cuarta, sería a palos y a piedras, ya que retrocederíamos muchos
años con la tercera y tendríamos que volver a comenzar nuevamente, claro si
llegan a quedar sobrevivientes.
Esto se dice por lo
adelantado de la tecnología y los aparatos modernos que utilizan las potencias
o los países más desarrollados militarmente hablando, para los conflictos
bélicos, puesto que ya no se usan bombas o balas, sino virus, como el actual,
con la pandemia de La COVID-19 y la contaminación, bien sea al agua o al aire
que respiramos, lo que sería mucho más peligroso, debido a que no podríamos
evadir o escondernos de las guerras, ya que es una necesidad imperiosa la del
ser humano, como lo son, la de respirar y tomar agua, así como la de
alimentarse.
FUENTE.fda.gov
Los acontecimientos
están en pleno desarrollo, desde hace dos años, que la humanidad padece este
virus, del que muchos creen es para implementar un nuevo orden mundial, desde
su aparición en la ciudad de Whan en China, según los medios de comunicación, y
las entidades médicas del mundo, pero no se sabe a ciencia cierta cuál es la
verdad, puesto que esta es una guerra de cuarta generación, y como dice el
dicho en una guerra, la primera víctima es la verdad.
Solo esperamos que
quienes tienen el poder de la tecnología, de las armas y la ciencia
recapaciten, que la tierra nos pertenece a todos por igual y no a una raza
excelsa y privilegiada, que recapacitemos todos, por el daño que le estamos
causando a todo lo que nos rodeaya nosotros mismos, por el ansia de poder y
dominio, que la tierra puede vivir mucho sin nosotros, pero nosotros sin ella
no.
La
muestra es evidente, en los días de encierro y acuartelamiento del ser humano
por La COVID19, la capa de ozono se ha restablecido, los mares y ríos están más
limpios y menos contaminados, las aves vuelan más tranquilas, los animales
sufren menos maltrato y los peces salen a las orillas para alimentarse o para
divertirse.
Por: Iván Fernando Márquez Gómez.
nabusimake3@gmail.com
Teléfono: 3013942339