¿Honorables
congresistas?
Honorable significa,
persona que es honrada, íntegra, justa y recta en las buenas acciones y merece
el respeto de los demás.
¿Cuántos congresistas
de Colombia, tienen juicio pendiente con la justica, o fueron, llamados a declarar
por algún caso de corrupción, bien sea en la misma política o en su vida
personal, lo que es mucho peor, todavía cuántos están inmersos en esos casos de
corrupción y sin embargo, ostentan un cargo político o una curul, devengando
sueldos elevadísimos.?
Pero la culpa no es de
ellos, por aspirar o tener un cargo de estos, sino de las injustas y absurdas
leyes colombianas, que permiten este exabrupto, al poder ostentar un puesto en
el Congreso tranquilamente, cuando lo primordial y fundamental, debería ser:
Que la persona sea honrada y no tenga cuentas pendientes con la justicia, o
algún caso abierto por un dudoso comportamiento, así si podría ser elegida.
No olvidemos que en el
año 2014, había 35 candidatos al Senado y a la Cámara, investigados por la
Corte Suprema de Justicia, por tener vínculos con la parapolítica, solo 9 se
quedaron sin curul. Es decir 26 congresistas señalados de tener nexos con las
AUC, repetirían en el cargo y están siendo investigados por la Corte Suprema,
por pertenecer a grupos armados ilegales, pero eso a nadie les preocupó,
parecía tan normal en este país.
Así mismo, en el
proceso de paz, iniciado por el anterior gobierno de Juan Manuel Santos, muchos
ex guerrilleros de las FARC, fueron elegidos para ocupar una curul, sin el voto
popular, es decir directamente mediante un decreto, fueron convertidos en
congresistas, olvidando al pueblo quien es el que debe decidir, si quiere o no
aceptar estas personas en la política.
¿Con qué moral, se
podría llamar democracia y justicia a un gobierno así y honorables
congresistas, a unas personas, que tienen cuentas pendientes con las leyes?
La presunción de
inocencia, así lo determinan las leyes y los juristas, permite que estas
personas aspiren a estos cargos políticos, pero la justica, la ética y los
principios morales está en tela de juicio, tanto de los aspirantes, como de
quienes avalan, que una persona cuando está siendo investigada, pueda aspirar a
un cargo político, solo hasta que se compruebe total y absolutamente su inocencia,
ya que esto crea dudas y suspicacias.
¿Y si al final, estas
personas resultasen culpables: ¿El dinero que se le pagó como senador o
representante, que es una fortuna, sería devuelto? Claro está, que eso es mucho
pedirle a las leyes colombianas, si esto sucediera, más de la mitad de estos
ilustres y honorables congresistas, como se hacen llamar ellos mismos, estarían
tras las rejas o jamás podrían postular sus nombres para ser congresistas.
¿Pero por qué ese afán
desmedido, de ocupar un puesto en el Congreso? Los aspirantes invierten cifras
elevadas de dinero en sus campañas, para llegar hasta allí, una persona de
bajos recursos y sin el reconocimiento de algún partido político tradicional
del país, jamás llegará a desempeñar un puesto de estos ¿Será que si el sueldo
de un congresista es de uno o dos salarios mínimos, estas personas se
esmerarían igual, por llegar al Congreso colombiano?
Lo que hace concluir,
que la política es un negocio, de
familias reconocidas históricamente, pudientes y elitistas en donde se puede
recuperar el dinero invertido en las campañas, estando dentro de ella y amasar
una gran fortuna si es apoyado por las élites y por quienes mandan
políticamente en esta nación.
El cinismo, la falta de
altruismo y de colaboración, de la gran mayoría de estos congresistas no tiene
límites, cuando son entrevistados por los medios de comunicación, lamentándose
de las tragedias y dificultades de millones de colombianos, ellos solo dan
ideas tan obvias y elementales que causan risa, se creen los genios y más
inteligentes que todos, buscando una solución, pero nunca aportan un peso, para
paliar las grandes necesidades del país, dinero que es de todos los
colombianos, puesto que su sueldo devengado, sale de los impuestos de todos
nosotros.
En momentos de
dificultades y cuando se trata de colaborar, pero con dinero, no con palabras,
ni leyes o proyectos que en nada benefician a los más necesitados, estos jamás
aparecen, se ganan más de cuarenta veces lo de un salario mínimo colombiano y
nunca aportan para una noble causa, son pocos y muy escasos los que han sacado
dinero de su sueldo para ayudar a alguien.
¿Cuánto gana un
congresista colombiano, qué prebendas y ayudas recibe al ocupar estos cargos?
En comparación con otras naciones, de América y Europa, la diferencia es
abismal, vergonzosa y denigrante si comparamos ese sueldo con el salario mínimo
de un colombiano, ni hablar de los beneficios, estando en el Congreso y después
de retirarse si logra mantenerse varios períodos en ese puesto.
Un congresista colombiano, le cuesta mensual al
estado $48
millones, si se incluyen beneficios
importantes como primas de mitad de año y navidad, equipo de trabajo, tiquetes,
celulares, seguridad, entre otros, ascendería a más de 576 millones mensuales, como
si esto fuera poco, en
medio de la pandemia mundial de salud, COVID-19 querían aumentarse el sueldo,
que cinismo, que descaro, que falta de sentido común y respeto por las
necesidades de millones de personas en Colombia.
El sueldo mínimo
de un trabajador colombiano es de $1,423.500 mensuales que tristeza, no alcanza
a dos millones, una desproporción abismal, asombrosa, vergonzosa, es decir, con
un mes de sueldo, de un congresista, sería el sueldo de todo un año, de un
pobre obrero colombiano. Es decir al año, un colombiano con sueldo mínimo gana
$17,082.000.
Ahora sumemos esos $576
millones de pesos mensuales que gana un congresista por 12 meses, es decir un
año, la suma daría $ 6.916 millones, sin profundizar mucho, esto recibe un
“honorable congresista” luego esta cifra la multiplicamos por cuatro años, en
total serían $27,664 millones, es una cifra escandalosamente alta, si sumar
otras prebendas y ayudas, que reciben estos pobres trabajadores.
Esto es lo que ganan
algunos congresistas de otros países en relación a Colombia, llevando el sueldo
a Dólares.
Chile………………………………
US$11.053
Colombia………………………….
US$9.306
Brasil………………………………
US$8.035
Panamá……………………………
US$7.000
México…………………………….
US$5.367
Uruguay……………………………
US$5.249
Costa
Rica…………………………. 5.106
Si en Colombia estamos
mal y reclamando por el elevado sueldo de los congresistas, los chilenos están
mucho peor, será que habrá alguna manera de acabar con esta
tremenda desigualdad e injustica, no solo en Colombia, sino en otros países?
Ahora, veamos al sueldo de una nación europea, a ellos que les gusta poner de ejemplo a ese
continente por su modo de vida, por qué no imitan a ese país y hacen una
reforma al Congreso?
Suecia,
es el país en donde los Congresistas ganan menos dinero y tienen muy pocas
ayudas o prebendas.
Esto es lo que gana un
congresista en Suecia. Ellos, ganan 63.000
coronas, en su moneda nacional, que son un poco más de 21 millones de pesos, de
allí deben pagar impuestos por dichos honorarios, pero lo más importante es que
el sueldo mínimo un trabajador, sueco, son 12 millones de pesos, si notan la
enorme diferencia con respecto a Colombia.
Pero no solo eso, son muchísimas más cosas que
destacar, con relación a los beneficios que tienen los congresistas en
Colombia. Los parlamentarios de Suecia, viven en apartamentos de
solo 18 metros, lavan su ropa sin ninguna ayuda y no tenían ningún tipo de
empleados estos inmuebles no hay lavadora, ni lavaplatos, ni siquiera cama matrimonial. Una gran parte de estos
apartamentos ni siquiera tienen habitación: una sola estancia, amueblada con
sofá cama, hace las funciones de sala de estar y dormitorio.
Hasta los
años 90, los apartamentos para funcionarios ni siquiera existían en Suecia: los
diputados dormían en sofás-cama en sus propios despachos lavan los platos y la ropa en la pila del despacho.
En la cafetería del Parlamento, los diputados se pagan
su café.
No hay camareros y hay que pagar por la comida.
Después de comer, cada parlamentario debe llevar su propio plato al sitio donde
se recogen las bandejas, al lado de la cocina.
Suecia, es el cuarto país del mundo, con mejor puntuación en materia de
igualdad social.
Los diputados pueden dejar
ocasionalmente a sus hijos, si tienen entre uno y trece años, en la guardería del
Parlamento durante las sesiones deliberativas. Pero tienen que pagar la comida
de los niños.
Los carros no sirven
para llevarlos a casa, el único político que
tiene derecho a carro de forma permanente es el primer ministro, es decir el
presidente del país.
Antes, en 1957 los
diputados del Parlamento sueco ni siquiera tenían salario, solo recibían las
contribuciones de los miembros de los partidos. Los aumentos de salario de los
ministros y del primer ministro también los decide un comité independiente, es
decir que el Congreso no tiene nada que ver en esta decisión.
Los
parlamentarios suecos tampoco tienen el privilegio de recibir una pensión
vitalicia después de cumplir un mínimo de uno o dos mandatos. Reciben una
garantía de renta por tiempo limitado, hasta que encuentran un nuevo trabajo,
esta ayuda es retirada.
Los alcaldes no tienen
derecho a residencia oficial. Y en todas las asambleas municipales del país, la
regla no tiene excepción: los concejales no tienen salario, secretaría,
asistentes, carro con conductor, ni siquiera despacho trabajan desde casa y
ganan solo una pequeña gratificación por participar en las sesiones de la Cámara.
Igualito que en
Colombia, que injusticia, hasta cuándo el pueblo va a permitir que esas
personas sigan viviendo de los impuestos
y el erario nacional, encima de eso tienen el descaro de decir, que al
socialismo le gusta que todo se lo regalen, que no trabajan, como si ellos son
el mejor ejemplo de laboriosidad y honradez.
El pueblo colombiano
exige, que se les rebaje el sueldo y se eduzca el número de congresistas, para
que exista equidad y justicia con relación al sueldo mínimo, pero esta rebaja
no debería ser ni siquiera del 50%, ya que hasta 20 millones es demasiado, pero
una ley que pretendía reducir el salario a los congresistas, esto no pasó,
claro si ellos mismos son los que deciden qué ley pasa o no.
Es muy triste y
doloroso, que esa cantidad de dinero, se le entregue a esas personas, que
realmente no se lo merecen, ¿Cuántas escuelas, hospitales, o fuentes de empleo,
se construirían con ese dinero, para mejorar la situación de vida de miles de
colombianos, necesitados y desplazados por la desigualdad social, falta de
oportunidades y la violencia que azota a Colombia desde hace décadas?
Estas personas,
trabajan muy poco, en los cuatro años que ocupan esos cargos por no decir que
nada y encima de eso. Reciben primas millonarias, dos veces al año, así mismo
un incentivo como viáticos de 14 millones de pesos, para los que viven fuera de
la capital del país.
¿Usted cree que eso es
justo. Que se sigan eligiendo a estos supuestos honorables congresistas con
estos sueldos tan elevados? Que vivan como reyes y como si esto fuera poco, no
se les puede juzgar, mientras ostenten ese cargo, ya que tienen inmunidad
parlamentaria, habrase visto semejante injusticia, falta de equidad y ética
moral.
Para terminar de
completar el pastel y ponerle la fresa que lo adorna, si son encontrados
culpables por algún delito, les dan unos años, como casa por cárcel, se van
para una mansión con millones en el banco, a disfrutar sus últimos años de
vida, mientras la gran mayoría de los trabajadores, deben partirse el lomo, por
más de 30 años y encima de eso, sumar las semanas exigidas por el injusto
gobierno, para recibir una miseria de pensión, por más de la mitad de su vida
entregada a su trabajo.
Despierta
pueblo colombiano, ¿hasta cuándo vamos a permitir estas injusticas y
desigualdades?
Por:
Iván Fernando Márquez Gómez.
Teléfono:
3013942339
No hay comentarios:
Publicar un comentario